GUÍA PARA CREAR TU EMPRESA: SABER RECLUTAR, UNA GARANTÍA PARA CAPTAR INVERSORES
Quizá no lo sepas, pero para los inversores que pueden apoyar económicamente tu ‘start up’ la calidad y solvencia del equipo que puedas formar es un factor más importante que la propia idea o el proyecto de empresa que pretendes crear.
Saber contratar y acertar con los socios y empleados que te acompañarán en tu aventura empresarial no sólo te dará tranquilidad y hará prosperar tu compañía. Además, es un factor determinante para convencer a los inversores sobre la viabilidad de la empresa que quieres poner en marcha.
Cada vez más emprendedores se dan cuenta de que lo verdaderamente difícil no es encontrar capital, sino hallar y captar el talento adecuado para desarrollar una compañía. Entre otras cosas, porque las start up innovadoras son las que resuelven problemas y satisfacen necesidades que nadie más (o muy pocos más) pueden solucionar, y esto implica exigencias profesionales nunca vistas. De algún modo, los verdaderos emprendedores y sus nuevas compañías generan nuevos empleos que exigen diferentes perfiles. Y esto resulta muy difícil de encontrar.
Mantener los retos
Ten en cuenta que los inversores se fijan más en las personas -tu equipo- que en el proyecto. El grupo inicial con el que se comienza la aventura de la start up es uno de los principales argumentos para lograr el apoyo de los inversores. Al crear tu compañía debes procurar que ésta mantenga los retos que motiven permanentemente a quien contrates.
Los expertos aseguran que los 20 primeros empleados o colaboradores que decidas contratar resultan fundamentales para el futuro de tu compañía. Pero además estos primeros empleados marcarán el tono de las futuras contrataciones.
Tu nueva compañía debe ser el caldo de cultivo que estimule y premie el reto. Busca socios y colaboradores que piensan de forma distinta y que revolucionan la organización cada día. Ensambla un equipo que aporte respuestas diferentes, con capacidad para que se puedan llevar a cabo las ideas disruptivas.
Procura que tus empleados sigan creyendo que la empresa brinda oportunidades de crecimiento y desarrollo profesional. Debes cultivar el emprendimiento entre los equipos y ofrecer a tus empleados la posibilidad de dirigir proyectos. Aprovecha la oportunidad de involucrar a tus colaboradores en todas las iniciativas posibles de la compañía, y no olvides que la gente busca reconocimiento.
Tu start up debe ofrecer a tus empleados (actuales y futuros) experiencias que puedan superar a cualquier recompensa monetaria.
No seas convencional
Busca a aquellos que presenten currículos que reflejan trayectorias profesionales poco convencionales.
Al formar y gestionar un equipo eficaz debes ser capaz de gestionar diferentes personalidades. Este es uno de los principales retos del emprendedor.
Al fichar debes tener en cuenta que el «quién» es mucho más importante que el «qué». Esto significa que las actividades que ese empleado potencial ha realizado previamente en otras compañías pueden ser sólo parcialmente aplicables a las funciones que deberá desempeñar en tu empresa. Recuerda que los éxitos pasados de un profesional en otra organización pueden no repetirse en tu start up. No fiches al mejor sobre el papel, sino a quien se adecue mejor a la cultura de tu empresa y a sus objetivos.
Huye de la mediocridad
Los empleados más valiosos recelan de una organización que muestra un alto grado de tolerancia hacia la mediocridad. Evita que el entorno laboral que has creado se convierta en una maquinaria que promociona a los incompetentes.
Mantén el espíritu ‘start up’
La cultura y el ambiente laboral especial que has creado con tu start up no se puede perder, aunque la compañía crezca. Puedes mantener el impulso del primer día.
Una de las principales características de la mentalidad start up es tener las expectativas claras. Saber qué se espera es fundamental, sobre todo para tus empleados. Hay que tener objetivos claros y estar muy seguro de qué se va a hacer para cumplirlos.
Debes saber qué quieres hacer, cómo quieres que la gente lo haga, para quién lo hacéis y por qué. Es necesario que inviertas tiempo en compartirlo con tu equipo, y debes asegurarte de que hay una conexión con lo que tu gente quiere hacer, cómo quiere hacerlo, para quién lo quiere hacer y por qué.
Tienes que ser el jefe que comunica, y esto te debe llevar por una vía de doble dirección entre tú y tus colaboradores. Procura escuchar las opiniones y preocúpate de la satisfacción de tus empleadoss.
Como fundador de la empresa debes creer en ti mismo, porque eres responsable de toda tu organización. Has de demostrar un alto grado de autosuficiencia.
Otra de tus misiones es convencer a tu equipo (actual y futuro) del éxito de tu proyecto.
A quién no debes fichar
Para mantener el espíritu start up y conseguir que tu proyecto siga asociado a la velocidad, a la agilidad, a los nuevos ritmos de trabajo, la flexibilidad, y a todo lo que significa ser una organización horizontal y colaborativa, debes evitar a los apáticos, los que se conocen como zombies de oficina. Frente a éstos están los colaboradores con planes ambiciosos y que persiguen grandes objetivos. No te preocupes si sus metas son diferentes a las tuyas. Aún en ese caso, debes fomentar su energía y que toda la organización se nutra de ella.
Olvídate asimismo de quienes dedican muchas horas -demasiadas- pero no llegan, ni obtienen resultados. No buscas una organización presentista ni debes fomentar el estar. Incluso con su dedicación de empleados sinceros, debes tener en cuenta su incapacidad para realizar el trabajo encomendado y que resulta necesario para que la compañía funcione.
No los desprecies, pero debes plantear abiertamente su situación y tomar medidas inmediatamente.
Nunca fiches a quienes no son partidarios de aportar ideas por una razón muy sencilla: para no tener que ejecutarlas. Se trata del prototipo de profesionales que no querrán estar cerca de la acción (que resulta básica en una start up) y que se mantendrán al margen cuando haya que tomar decisiones.
La habilidad de este tipo de profesionales está en hacer lo justo para que nadie pueda recriminarles, pero aportan el mínimo necesario. Puede que en una organización tradicional estos empleados puedan sobrevivir. Pero no en una empresa con mentalidad innovadora que persigue el resultado.
Egocéntricos, chismosos, ladrones de tiempo y agobiados tampoco te interesan.
Los primeros nunca tienen en cuenta a los demás, y los chismosos, junto con los creadores de rumores, se encuentran entre los peores colaboradores que puedes meter en tu start up. Aunque es prácticamente imposible conseguir cero rumor en una organización, debes tener en cuenta que si se da esta situación de chismes es porque éstos ocupan el lugar que no cubre la información oficial, y ésta es una señal evidente de que no eres el líder que comunica.
Por lo que se refiere a los los ladrones de tiempo, éstos resultan especialmente molestos en una start up, porque en una organización de este tipo se manejan plazos muy estrictos, y prima la acción y el impacto.
El agobiado que no gestiona el tiempo ni maneja su propio estrés hará enfermar con su pésimo estado de ánimo al resto de la compañía.
‘Inversiones a corto plazo’
La velocidad a la que evoluciona el mercado laboral te puede recomendar lo que algunos llaman la «inversión a corto plazo». Quizá te interese que buena parte de tus empleados pueda adquirir conocimientos o desarrolle habilidades rápidas y aplicables de forma inmediata (un lenguaje de programación, un idioma exótico, una tecnología innovadora) aunque tengan fecha de caducidad.
La carrera que han estudiado tus socios o empleados brinda una primera entrada en el mercado, pero es necesario invertir en nuevos activos (formación, experiencias o aportación en diferentes proyectos). El mejor activo es la adaptabilidad, la capacidad de aprender y de reaccionar a los cambios.
Saber despedir
Por último, has de tener muy en cuenta que tan importante como saber contratar es saber despedir. Muchos emprendedores primerizos tienden a contratar a la gente equivocada. Persistir en el error y no saber prescindir de quien no vale resulta crítico.
Noticia extraída de: expansion.com