Para tener éxito con tus presentaciones necesitas utilizar únicamente contenido que sea relevante y que apoye tu mensaje clave.
«En tus presentaciones resuelves problemas, ayudas a conquistar retos. ¿Qué mejor patrón para estructurar tus presentaciones que el usado a lo largo de los siglos? Presentar es contar historias«, plantea Gonzalo Álvarez Marañón en su libro El superhéroe de las presentaciones (Gestión 2000).
Álvarez Marañón propone seguir la siguiente estructura clásica:
1. PROBLEMA. «En el inicio (el planteamiento) introduces el tema de la presentación, fijas sus objetivos y anuncias la estructura de la charla, intentando atrapar la atención y tratando de conectar con el público con una apertura cautivante. Describes la situación de partida y el problema o reto ante la audiencia», explica.
2. SOLUCIÓN. «El cuerpo (el nudo) es la parte principal y que más tiempo te ocupará de la presentación. Explicas cómo resolver el conflicto. Transmites las ideas fundamentales de tu solución, idealmente no más de tres. Añades cuanta evidencia sea necesaria para persuadir a la audiencia de su adopción. No proporcionas a la audiencia ninguna información sin haber creado antes en ella la necesidad de recibirla», continúa.
3. ACCIÓN. «Por último, la conclusión (el desenlace) marca el final de la presentación. En ella proporcionas de manera clara y concisa la síntesis del mensaje de tu charla y llamas a la audiencia a la acción. Para motivarles, recalca los beneficios de la acción. El camino propuesto debe ser fácil, cómodo y seguro«, concluye.
«Antes de arrancar tu presentación», añade Álvarez Marañón, «la audiencia se hace tres preguntas»:
1. ¿De qué trata la presentación? «Debes ir de lo general a lo particular. Cuando planteas la situación de partida busca enmarcarla de tal forma que toda la audiencia esté de acuerdo con ella», propone.
2. ¿Por qué la presentación tendría que importarme? «Habla del beneficio. Háblales nada más empezar de lo que ganarán por escucharte. Hazles una promesa y cumple tu palabra», sigue.
3. ¿Cómo está organizada la presentación? «Muestra un mapa de ruta. Muestra el progreso a medida que vas cubriendo el material. Cuánto más cerca tenemos nuestro objetivo, mayor es nuestra motivación para alcanzarlo. Realiza una hoja de ruta visual», propone.
Y un último consejo: «Sigue la regla del cuatro. Al presentar la estructura, hazlo jerárquicamente. No más de cuatro elementos en una lista. Si necesitas más de cuatro, agrúpalos en otros grupos (con un máximo de cuatro elementos cada uno», advierte este experto en presentaciones públicas.
Noticia extraída de: emprendedores.es