A diario en las empresas se cometen errores. No hay que desorbitarlos, ni pasarlos por alto. Tienes la obligación de hablar con tus empleados.
Tarde o temprano te va a ocurrir: le vas a tener que comunicar un error a uno de los empleados de tu startup que con tanto cuidado seleccionaste. No puedes pasarlo por alto, ni darle más importancia de la que tenga la equivocación que haya cometido.
Lo más habitual es que no le hayas comunicado antes a nadie un error. Si tienes dudas sobre cómo hacerlo, debes tener siempre en cuenta estos cuatro consejos.
1. Házlo siempre en privado. La privacidad resulta clave. De la misma forma que debe hacerse de forma individual. No se trata de dar lecciones al resto, sino de comunicarte con ese empleado.
2. Debes mostrarle evidencias de ese error. A continuación tienes que enseñar a ese trabajador evidencias de lo que ha sucedido, encontrar ejemplos concretos de lo que ha sucedido. No se puede ir diciendo frases condescendientes del estilo «eres un desastre» (no debes utilizar nunca adjetivos calificativos). Tienes que hablar de hechos concretos, del objetivo: Tal día, hiciste esto y pasó esto. Me has entregado esto y está así, cuando yo te pedí que estuviera así. «Hay que centrarse en la tarea, no en la personas. Cuando le comunicas un error a una persona, tienes que hablar sobre el ‘hacer’, no sobre el ‘ser'», explica la escritora (su último libro es Entrena tu cerebro: Neurociencia para la vida cotidiana, Alienta Editorial) y consultora Marta Romo.
3. Debes conseguir que reconozca el error con sus propias palabras. «Cuando hay un error tienes que conseguir que sea capaz de reconocerlo. Hay que llevarle a través de preguntas, para que él sea quien lo acepte. Para eso hay que generar un entorno seguro en el que la persona pueda expresas que se ha equivocado. Si piensa que se le va a aplicar una penalización, se va a poner a la defensiva. Crear ese entorno de confianza. Es difícil, pero se puede conseguir hablando de los puntos fuertes. Contamos contigo, estamos satisfechos contigo en este tema, frases de este estilo. Siempre que no se trate de errores que supongan un cambio de función o un despido», matiza Romo.
4. Puede que su equivocación sea culpa tuya. Si hay errores de incompetencia, puede ser porque la persona no está en el lugar adecuado. Muchas veces las personas están en puestos que no les corresponden y eso es un error de la empresa. Hay que aceptar ese error. Si una persona está en el lugar inadecuado y por ese motivo se está equivocando, el error es tuyo porque has colocado a esa persona en ese lugar. Y eso hay que aceptarlo desde el principio.
Noticia extraída de: emprendedores.es