El cierre del crédito a pymes y autónomos puede conllevar la cancelación de parte o todos los seguros suscritos por ellas. Y es que las entidades que nieguen la renovación de la financiación a estos clientes o se la reduzcan más de un 35% estarán obligadas a detallarles qué pólizas vincularon con el préstamo para darles la oportunidad de rescindir el contrato.
La Ley de Fomento de la Financiación Empresarial obliga a la banca a avisar con una antelación mínima de tres meses de que piensa cerrar el grifo del crédito para evitar una repetición de los apuros y colapsos en pymes y autónomos derivados de la falta de financiación que ocurrieron durante la crisis. Para facilitarles la búsqueda de proveedores alternativos, entregarán gratis a sus clientes un rating de solvencia y un informe con el historial financiero de los últimos cinco años.
Aviso tres meses antes
Entre los datos que integrarán dicho reporte figuran las pólizas, con detalle de la tipología de cobertura, la compañía, el importe suscrito y fecha de caducidad. La iniciativa la impulsó la Asociación Española de Corredores de Seguros (Adecose), que aúna a firmas con el 60% de las primas gestionadas por estos mediadores, en la tramitación parlamentaria de la Ley de Fomento de la Financiación. Su plasmación queda materializada con la inclusión de dichos datos en el proyecto del informe elaborado por el Banco de España que deberá entregar la banca, puesto a consulta del sector hasta diciembre del pasado año.
A efectos de la consignación se considerarán seguros asociados los contratados dentro del plazo de seis meses, antes y después, del perfeccionamiento del contrato de crédito o préstamo, o en cualquiera de sus prórrogas.
La idea es que, igual que se les garantiza tiempo suficiente para ajustar su gestión de tesorería o buscar fuentes alternativas de financiación, podrán decidir si cancelan las pólizas, detalla Adecose.
Filón para la banca
Los seguros se han convertido en un filón para la banca en los momentos de mayores tensiones de financiación, exigiendo la contratación creciente de coberturas para conceder la operación. Es fácil encontrar líneas de financiación con seguros asociados de responsabilidad civil, industriales o, incluso, de vida de los directivos de la empresa; al igual que los de vida y hogar se ofrecen ligados con frecuencia con la firma de una hipoteca para abaratar el diferencial del tipo de interés aplicado.
Conocer de su existencia cobra especial importancia dado los rígidos plazos para su resolución. A diferencia de otros productos financieros, los seguros no pueden cancelarse en cualquier momento. Los asegurados tienen que comunicar cualquier rescisión con un mes de antelación antes del vencimiento de la póliza o se renovará de manera automática -si ocurre el 31 de diciembre, por ejemplo, el aviso debe cursarse como muy tarde el 30 de noviembre-.
La ley de Supervisión acortó el plazo de dos meses a un mes a partir del pasado 1 de enero, mientras que las aseguradoras deben comunicar a su vez cualquier cambio con dos meses de antelación.
Noticia extraída de: eleconomista.es